La globalización económica es una realidad cuyos efectos benefician a unos países más que a otros. Cuando se habla de competitividad global, de lo único que se trata es de tratar de sacar el mayor provecho posible como país, en este proceso. Es imposible que un país sea competitivo en todos los aspectos. Especialistas de renombre mundial plantean que los países deben especializarse en lo que mejor saben hacer. A nadie le quepa la menor duda de que lo que mejor hace el Perú con estándares mundiales de trabajo, es la minería, ahora seguido por la producción de productos agrícolas de alto valor admiradas y consumidas en el mundo. Tenemos otros recursos como nuestra biodiversidad, la pesca, el turismo, el gas, caídas de aguas, energías renovables como la eólica y solar, pero, los montos de dinero que se pueden obtener para que el Estado realice obras, no son de la magnitud que la minería ofrece, aún con las fluctuaciones en los precios internacionales de los metales que producen las empresas que operan en la industria minera peruana.

Ahora, también somos conscientes de que la sola tenencia de recursos minerales no garantiza nuestro desarrollo sostenible como país ni la competitividad global en sectores diferentes al extractivo. La verdadera sostenibilidad de nuestro desarrollo se va a dar cuando en base a la investigación científica, desarrollemos la tecnología necesaria para pasar a ser un país exportador de materias primas a ser un país exportador de tecnología. El punto de partida para alcanzar este verdadero desarrollo tiene sólo una receta mágica: invertir en educación.

La minería, aprovechada de una manera socialmente responsable por las empresas y avalada con sinceridad por parte del Estado peruano ante la población, es lo que el Perú tiene hoy a la mano para hacer la “caja” que permita desarrollar todo un proceso que nos lleve a ser un país del primer mundo. No tenemos otro camino. Los demás sectores productivos son también muy importantes pero tienen un techo. El sector extractivo es el que más nos puede ayudar por una razón muy sencilla: la globalización económica está generando el crecimiento demográfico de países que cada día demandan más minerales y metales para que sus poblaciones alcancen una vida cómoda.

En el Perú no podemos seguir oponiéndonos al desarrollo de importante proyectos mineros. El seguir haciéndolo es como dispararnos a los pies. Objetivamente, no encuentro un recurso que nos permita generar ingresos de manera más rápida. Sólo nos falta el entendimiento entre peruanos. A nuestros hermanos peruanos que aún creen que la minería es sinónimo de contaminación, les digo que existe una minería limpia, lo llamo minería verde, les pido que reparen el camino que nos espera para ser un país desarrollado. Nuestros hijos y nietos se merecen un futuro diferente al que tuvimos.

Más que como ingeniero de minas me dirijo a ustedes como peruano. Todo proceso de desarrollo tiene un costo. Analicen el costo y el beneficio de desarrollar la industria minera pero pensando en las futuras generaciones. Mi visión de país me hace ver que el Perú no sólo es de nosotros, es también de los que vienen. La actual tecnología permite una convivencia armoniosa entre minería y agro, entre lo rural y lo urbano, entre las empresa mineras y sus respectivos entornos sociales. Esto se puede verificar con mediciones continuas de los impactos sociales de las actividades mineras. La industria minera peruana está en la total capacidad de afrontar la responsabilidad que estoy proponiendo. La historia se desenvuelve en un tetra dimensional espacio-tiempo en el que cada recurso tiene la debida importancia en un instante dado. No dejemos pasar esta oportunidad.

Por Ing. Rómulo Mucho
Ex Viceministro de Energí­a y Minas

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WHAT DO WE HAVE “AT THE HAND” IN ORDER TO REACTIVATE THE ECONOMY?

The globalization of worlds economy has effects that benefit some countries more than other ones. When speaking about globalization, the goal for any country would be to take the biggest possible advantage of this process. Nevertheless, it is not possible to be competitive in all aspects, and according to the specialist in this field, every country should concentrate in what they are best at. According to international working standards, there is no doubt that in Peru we are best in mining, followed by some high quality agricultural products. We can mention other resources like biodiversity, fish products, tourism, gas, water falls and renewable energy, but the income from these resources is not high enough for the government to invest on them. Even though the mineral prices do fluctuate in Peru, no other industry compares with mining when it comes to the income received.

At the same time, we must be conscious about the fact that sustainable growth or global competitiveness for a country requires more than growth in one sector. Through higher knowledge and scientific investigation, we can develop the technology necessary to take the next step; instead of exporting raw material, we can export technology. In order to reach this goal, the start point for any country has one magical word: investing to education.

The mining industry in Peru today comprises atmosphere of social responsibility by the companies involved in it, and also counts with support from the Government when facing any issues with Peruvian citizen. This is what we have at the hand, in order to develop and transform Peru to first world country. The development through mining industry is the best option for Peru, the other sectors mentioned are also productive, but with a certain limit, which is not the case for mining industry. The global economy is generating a demographic growth in all countries with growing amount of mineral extraction, allowing better life conditions to the population.

In Peru we cannot continue opposing to new mining project; this would be against our own interests. Objectively speaking, I cannot find any other resource that would permit us to generate income more rapidly. Many Peruvians still believe that mining means contamination, opinion that need to be changed, informing about the existence of clean and green mining with less impact on environment. By this way we can achieve development and better future for the next coming generations of Peruvians.

I am expressing this message more as Peruvian, not as mining engineer; we should all analyze the benefits and costs caused by mining in Peru, particularly focusing on the future and the coming generations. Today’s technology permits coexistence between agro and mining, between urban and rural, between the mining companies and their social surroundings; condition that can be verified by continuous measurements of the social impact caused by mining industry. The Peruvian mining industry has a total capacity to meet the responsibility I am proposing, and we should not miss the opportunity this industry represents for Peru today.