El gran desafío social que el Perú merece y espera

Nuestro país vive hoy un momento difícil, donde campea el desconcierto, la incertidumbre y la inseguridad, debido a que atravesamos por una crisis en materia de principios y valores éticos, morales y cívicos, bajo la sombrilla de una clase dirigente indolente y negligente, que corroe día a día, los cimientos de una sociedad perturbada por la violencia y la indiferencia.

Algunos piensan que los valores son un asunto personal y que cada uno tendrá que ver cómo alcanzarlos o la forma de practicarlos, pero la realidad nos está enseñando que el desmoronamiento de estos en las últimas generaciones, son parte del asunto social debido al ambiente en que vivimos y del entorno que formamos, de la forma de conducirnos, y del poco respeto que nos brindamos. aspectos que tienen gran impacto y afectan al mundo que nos rodea.

Hay quienes sostienen, además, que los valores están ligados principalmente a la economía, o al estatus social de las personas y que, son parte de una sofisticación estéril orientada a conseguir figuración, admiración e independencia material y que son impracticables en la medida que existan intereses y mentes acomplejadas.

Esto no es verdad, porque una sociedad se consolida solo cuando sus ciudadanos son capaces de crear a través de una escala de valores, principios, hábitos y costumbres, buenas maneras de comportamiento y de absoluto respeto por el prójimo, y responsabilidad para con las nuevas generaciones del futuro, con el fin de construir país, creando las condiciones necesarias y favorables para hacer tangible ese beneficio que todos esperamos, cual es, conducirnos hacia un futuro próspero en medio de un país civilizado y ordenado….

Luis Ernesto Cáceres Angulo

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