Fue la Empresa del Tranvía Eléctrico. que tuvo 25 tranvías con motor General Electric de 600 voltios. recorrían 18 km en total, trabajaban 300 personas y se conformó un Directorio que lo presidió Jorge Alberto Liosa. Unía destinos lejanos en poco tiempo entre la ciudad y la campiña, el tren urbano que comenzó a operar en 1913. pronto se convirtió en la fuente de amores y de palomilladas. Unos años antes ya funcionaba el “tranvía desangre”. no era otra cosa que un vagón ligero montados en una vía férrea. jalada por bestias de carga que desataba una gran polvareda capaz de ser divisada a la distancia.

TRILOGÍA A UN GRAN RITMO

Para el periodista Luis Eduardo Podesta. el ‘tranvía era la fuente de viajes, amores y palomilladas”.

AMORES NO TAN PASAJEROS

En la época que funcionó el tranvía (1913 y 1966), surgieron varias parejas de *viaje’ y los amores furtivos. ¿Cómo surgían esos añores señores Podesta?. Bueno había varias maneras pero las más conocidas eran, aquellas donde los jóvenes atraídos se ponían de acuerdo para abordar el tranvía a determinada hora, ahí ocupaban los asientos posteriores. Y la otra modalidad era que viajan de incógnita hacia dos destinos idílicos de entonces, como eras las piscinas de Tingo y de Sabandía a este último distrito vía Paucarpata hasta donde llegaba el moderno transporte.

LA ‘GORRA” DE LOS CCOROS

Una de las diversiones sanas e infaltables de los niños, adolescentes y hasta adultos era el “gorreado” o la “gorra” al tranvía, que no era otra cosa que encaramarse y viajar gratis, ante la cólera de los conductores (cobradores), que muchas veces los correteaba a correazos.
Los “ccoros” (niños-adolescentes), se retaban a ver quién viajaba el trecho más largo sin ser descubierto. Otros desafiaban a ser Invisibles- y viajar bien sentados para no ser detectados para pagar el pasaje. Muchos sufrieron caídas y tropezones, pero no iban más allá de un pantalón roto plenamente justificado por haber “engañado al conductor”.
Hasta hace unos lustros en reuniones sociales salía a relucir el atrevimiento más grande, todo de manera sana y sonoras carcajadas.

LOS VIAJES DE ENSUEÑO

Antes del tranvía unir Tingo y Arequipa. Paucarpata y Arequipa o Miraflores-Arequipa, significaba toda una diligencia con avituallas incluidas dada la lejanía. Los tranvía a Tingo, de color rojo con rayas a sus costados eran los más demandados los fines de semana, los demás días era
para que los afuerinos (lejanos) realicen sus trámites, visitar a la familia urbana, realizar compras y regresar de una agotada jornada. El tranvía a Paucarpata y Miraflores eran verdes. no generaban ningún ruido molestoso ni tampoco conta-minaban. Los maquinistas los que conducían el tranvía era respetuosos y pulcros, lejos de los choferes de las combis actuales.

LAS “GONDOLAS”, LOS EXTRANVIARIOS, EL FIN

Años antes que dejará de funcionar el tranvía (1966), comenzaron aparecer en Arequipa los buses que pronto fueron bautizadas como las “góndolas” por su apariencia ovoide, por sus ventanitas de madera casi siempre atracadas arriba o abajo y claro su autonomía para saltarse una calle o parar donde quiera su mayor atractivo y por supuesto la novelería.

Las ‘góndolas’ pronto fueron la competencia más seria del tranvía y al final derrotaron a la máquina pesada lenta y romántica de los tranvías. Con las “góndolas” Arequipa ingresa a la modernidad, al apuro eterno. MONORRIEL, DE SUPERFICIE 0 SUBTERRANEO
Podemos decir que para darle una solución al caótico problema del transporte urbano se han propuesto hasta tres iniciativas. La primera fue la del monorriel o mejor dicho un tren elevado, que se desplaza por un solo riel y que se descartó el 2015 dado su contraste con la Arquitectura de la ciudad y por el peligro estando en una zona de grandes sismos. La segunda iniciativa la propuso el Ministerio de Transportes y Comunicaciones, que fue la del tren subterráneo o metro como en las grandes capitales . El metro ha sido descartado, por su elevado costo y a falta de más estudios.
La tercera es la del tren de superficie o el tranvía, con toda la modernidad como por ejemplo en San Francisco (Estados Unidos) o en Ámsterdam (Holanda). Sería toda una preciosura y solución en el transporte para el ciudadano.